Queda poco más de una hora para que comience el último mitin de esta campaña electoral. Esta mañana me preguntaban que si estaba cansado. Y, la verdad, no lo estoy. Podría continuar haciendo mítines, organizando la campaña, saliendo a la calle… y no me cansaría. Creo firmemente en la democracia y honrarla de esta manera, simplemente, me parece un ejercicio de participación precioso y necesario en esta fiesta de la democracia, a la que he aludido durante esta campaña.
Hoy digo adiós a la campaña electoral. A escribir diariamente, quizás. Quizás no. Pero a quien no digo adiós es a vosotros. Me tendréis, si depositáis en mí vuestra confianza, con la puerta de Alcaldía abierta. Y pase lo que pase el domingo, tened por seguro que me tendréis trabajando incansablemente por vosotros, por vuestra calidad y por la justicia social que aprendí desde pequeño gracias al ejemplo de mis padres.
Esta mañana también me han preguntado que qué resultados esperaba para el domingo. No lo sé. Jamás he encargado encuestas. Mi termómetro sois vosotros. Mi termómetro electoral sois quienes os acercáis, quienes me habláis… No me pongo nervioso ante las frías estadísticas porque en lo que confío es en la calidez de quienes me miráis a los ojos. Mirada que os puedo devolver sin bajar la cabeza, lo cual me enorgullece.
Esta campaña he confeccionado mi propio eslogan de campaña, que he repetido en todos los mítines: «Busca, compara y, si encuentras algo mejor, vótalo». Hoy, aquí en estas líneas, no voy a volver a desgranar programa electoral ni argumentos de por qué votar al Partido Popular. sólo os voy a decir que mañana recapacitéis, que meditéis vuestro voto durante la jornada de reflexión, porque el día 25, o dentro de un mes, o dentro de un año… no podemos devolver el producto.
Por último, gracias al equipo, a la candidatura, a los incondicionales, a los que nos habéis visitado en los mítines, a los que nos habéis parado por la calle… Gracias a todos los vecinos y vecinas por una campaña inolvidable.